Cuidado en casa de amigos o familia

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En muchos estados, los cuidados a los pacientes, proporcionados por amigos y familiares, desempeñan un papel indispensable en el sistema sanitario. A menudo asumen la responsabilidad principal del cuidado de sus amigos o familiares necesitados, proporcionando un valioso apoyo, que va mucho más allá de la atención puramente médica. Esta tarea conlleva muchos retos, pero también aporta una profunda satisfacción personal y el fortalecimiento de las relaciones.

En este artículo, resaltamos para ti los numerosos aspectos y requisitos de la asistencia domiciliaria a amigos y familiares en EE. UU., proporcionamos consejos útiles y destacamos los servicios de apoyo que pueden facilitar el día a día de los cuidadores.

¿Qué significa ser el Cuidador para un amigo o familiar?

Como cuidador de un amigo o de un familiar, eres el principal responsable de tu ser querido. Desempeñas un papel crucial en su vida, reconoces sus necesidades y te cercioras de que esa persona reciba el mejor cuidado posible.

Empero, es esencial que no descuides tu propia salud y bienestar. Cuidar de amigos y familiares puede ser agotador, lo mismo física que mentalmente. Es absolutamente normal que a veces te sientas abrumado, inseguro o incluso enfadado.

Como cuidador(a), tienes una gran responsabilidad. Es importante que no lo hagas de forma aislada. Busca ayuda y sustento, ya sea a través de asesoramiento profesional, grupos de apoyo o simplemente en conversaciones con amigos. No tienes que cargar con todo tú solo.

Los importantes primeros pasos

  • Buscar apoyo: Hay muchas organizaciones que ofrecen asesoramiento especializado y apoyo a los cuidadores. No dudes en recurrir a estas.
  • Crear una red: Intercambia ideas con otros cuidadores. Las experiencias y sugerencias que vengan de otros suelen ser de gran ayuda.

Decisiones en el cuidado diario

¿Quedarse en casa o mudarse a una casa de cuidados?

Muchas personas preferirían ser atendidas en casa durante la vejez. Y sin embargo, a veces las necesidades de cuidados son tan elevadas que una residencia de ancianos es la mejor opción. Tómate tu tiempo para considerar todos los factores clave, al momento de ponderar tu decisión.

El nivel de cuidados que requiere el paciente¿Qué cuidados necesita tu amigo o familiar? ¿Es que necesita cuidados las 24 horas del día, o sólo ayuda ocasional? Algunas personas precisan de cuidados médicos especializados, los cuales son difíciles de proporcionar en casa.
Tus habilidades y recursos¿Dispones de los conocimientos y habilidades necesarios para proporcionar los cuidados requeridos? A veces los cursos o la formación pueden ayudar, pero también puede ser necesaria la atención profesional.
Tensión emocionalCuidar de un amigo o familiar puede ser desgastante en la dimensión emocional. Considera si es que eres capaz de hacer frente al estrés y a las exigencias emocionales.
Disponibilidad de tiempo¿Cuentas con el tiempo suficiente para cuidar de tu amigo o familiar? Esto puede afectar a tu trabajo, tus compromisos sociales y demás aspectos de tu vida.
Consideraciones económicasLa asistencia a domicilio puede implicar lo mismo costos que ahorros. Por eso es importante comparar el costo de los cuidados en casa (ejemplo: de la ayuda profesional o de los servicios de atención domiciliaria) con el costo de una residencia. En algunos estados hay disponibles ayudas económicas, y puede haber otras prestaciones de las que puedes hacer uso.
Red de apoyo¿Cuentas con una red de amistades, familia y/o servicios que puedan auxiliarte? Esto podría ser crucial al compartir la carga en la provisión de cuidados.
Calidad de la casa de tratamientoSi vas a elegir una casa de tratamiento, es importante que tengas en cuenta la calidad y la reputación del centro. Una visita presencial puede ayudarte a hacerte una idea del ambiente y los cuidados que ahí se prestan.
Los deseos de la o el pacienteLa persona que es paciente, ¿qué desea? Sus deseos y sentimientos deben desempeñar un papel central en la decisión.
Visión a largo plazoPiensa en cómo podría evolucionar la situación de los cuidados en los próximos meses o años. Las necesidades de cuidados podrían incrementarse con el tiempo.
Consideraciones de saludHay situaciones en las que una casa de cuidados puede ser la mejor opción por motivos de salud; por ejemplo, si se necesitan cuidados o equipamiento médicos de especialidad.
¿Quedarse en casa o mudarse a una casa de cuidados?

Al final del día, la decisión es muy personal, y habrá de tomarse con base a tu situación específica, lo mismo que las necesidades de la o el paciente. Podría ser útil el buscar asesoría profesional, o consejo de otras personas cuidadoras, para así tomar la mejor decisión posible.

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